“Si sentís ruido de fondo, es por eso, recién se presentó un misil arriba nuestro que lo bloquearon en realidad, pero debido era todo, pero bien, bien, tranqui”, dijo Carlos Albisu, en un día de esos en Israel, en un refugio.
Hoy esta camino de regreso a Salto, seguramente con un bagaje extra de lo que fue a buscar, porque quedar atrapado en medio de una guerra, un drama existencial, de esa naturaleza, aunque no querido, enseña.
Mientras estaba en Israel, en el campo universitario, en las recorridas, se mostraba tranquilo e intentaba transmitirlo.
Contaba sobre la llegada de los misiles: “Acá hubo una alerta, y la alerta tiene 25 o 30 minutos, entonces tenés tres avisos, uno cuando divisan que salieron, y después cuando están llegando. Después en este momento estamos en el vivo bélico que tienen, y la defensa, que son también una escalada de seis minutos. Lo que fue la madrugada del sábado para domingo, fue intensa”.
Albisu contó que junto a él habían 36 intendentes latinoamericanos y que se había buscado para todos una salida.
Esa salida en principio no era recomendable, o se iba a Egipto o a Jordania, pero el devenir de la guerra llevó a una decisión, y esa fue salir por Jordania.
Allí comenzó otra historia, fue el comienzo de un viaje de regreso, del cual se estima, Carlos Albisu llegará a Salto este jueves.
