Esta típica fruta de esta época del año debe elegirse por su aroma perfumado. Es preferible no elegir aquellas frutas que presenten olores extraños como, por ejemplo, a tierra.
Tampoco es recomendable seleccionar aquellas que no presenten ningún aroma, ya que seguramente se encuentren inmaduras y el melón no continúa madurando luego de la cosecha, por lo que no mejorará su sabor con el paso de los días.
El fruto maduro presenta una pulpa de color salmón, o naranja en el caso de los melones tipo cantaloupe, llamados en nuestro país reticulados o escritos (mayoritarios en la producción nacional). Se recomienda conservarlo en heladera, cuidando no dejarlo en bolsa de nylon cerrada o en contacto con otras frutas ya que posee una moderada sensibilidad al etileno.
El melón es una fruta con propiedades diuréticas y antioxidantes, aportando beneficios para la salud, como prevenir el envejecimiento prematuro y ayudar a perder peso, ya que es rico en vitaminas, minerales y antioxidantes.
Aparte de esto, el melón es un alimento rico en agua que mejora la función del intestino, previene el estreñimiento y ayuda a hidratar el organismo, pudiendo ser una opción saludable para refrescarse en los días calurosos.