«Al pasar por calle Gutierrez Ruiz cerca de la sede de Florida era común ver a don Mario Chiapini quien creo, cuido una plaza en un espacio abandonado, pintó piedras y muchas veces con dinero de su jubilación, compro plantas y pintura.
Mientras estuvo bien de salud nos llamaba o se iba hasta Servicios Públicos a hacer alguna solicitud. La semana pasada pasé, me llamo la atención que no estaba, pregunté y me dijo su señora que se venía recuperando. Hoy (Ayer, 24 de enero) me entero que había fallecido a su familia mucha fuerza». (Mario Furtado).
Con el permiso de Mario, también podemos decir que don Mario Chiappini era un vecino muy servicial, que siempre tenía una palabra de aliento a los que a diario pasábamos y sobre todo, cuando regresábamos del centro y teníamos que encarar la larga cuesta, hasta más allá de calle Charrúa. Le gustaba conversar, y mas de una vez nos detuvo con alguna pregunta circunstancial, para iniciar una charla. A los jóvenes los motivaba, los alentaba a estudiar, al trabajo, a las buenas acciones. Se sentía orgulloso de su placita, pasaba tiempo en ella, le dedicaba horas a mejorarla, y sería un acto de justicia que la misma llevara su nombre….
