Llegar al final de un emotivo espectáculo, con el público de pie y solicitando un nuevo tema, es el sueño de todo artista. Para Omar Espinosa y las guitarras que lo acompañaron, una caricia al alma que retribuyeron con un bis de la milonga a Salto…
Llegar al final de un emotivo espectáculo, con el público de pie y solicitando un nuevo tema, es el sueño de todo artista. Para Omar Espinosa y las guitarras que lo acompañaron, una caricia al alma que retribuyeron con un bis de la milonga a Salto…